Reflexión en torno a "Library managers and information in World 2.0"

El artículo de Suzie Allard parte de contextualizar la Sociedad de la Información y su natural evolución hacia lo que denomina "World 2.0", un nuevo contexto que se caracteriza por la globalización, un contexto económico donde todos pueden competir en innovación al mismo nivel, donde fluye la información de forma dinámica y continua. Un mundo en constante cambio y donde las bibliotecas están inmersas y por ello deben estar preparandas para afrontar los retos. Como bien dice la autora, están conviviendo los sistemas bibliotecarios tradicionales con nuevos paradigmas. En este sentido los gestores deben considerar las mejores estrategias para dirigir los desafíos de la World 2.0.

Seguidamente se identifican tres dimensiones de la World 2.0, en primer lugar la expansión del contenido, la velocidad a la que que se expanden esos contenidos y la acumulación de conocimiento. Se pone el acento en que el nivel de expansión de contenidos al que nos enfrentamos actualmente no ha tenido parangón a lo largo de la historia. 

Por otra parte, es muy interesante destacar, como nos apunta Allard, que actualmente en los centros de información, conviven diferentes generaciones de usuarios. Estos grupos tienen diferentes aptitudes, experiencias, capacidades así como expectativas en función de la relación que tiene su grupo generacional con las tecnologías. Los nativos digitales no tienen el mismo comportamiento que aquellos que pertenecemos a la llamada Generación X. Y paralelamente a los cambios en los grupos humanos, las organizaciones también tiene comportamientos nuevos que tienden a parecerse cada vez más infraestructuras cibernéticas o en red.

Concluyendo, las bibliotecas deben ser lo suficientemente ágiles para servir a los diferentes tipos de usuarios y explorar nuevas fronteras en la exploración y difusión de la información. En este punto, señala la importancia de aprovechar las folksonomías así como el potencial de la web semántica.
Para terminar, quizá la aportación más interesante del artículo sea el poner el acento sobre la obligación que los gestores tienen de situar a sus bibliotecas en un lugar relevante en el mundo virtual, posicionar a sus bibliotecas en la red puesto que ya no podemos contentarnos con vivir fuera de este universo 2.0.